DE ORUGA A MARIPOSA
Ciertamente
surgen diversas casualidades relativas a la trasformación de una persona al conocer
a Jesús, y estas casualidades se asocian con diferentes eventos naturales y
físicos que normalmente forman parte de nuestro entorno. Uno de estos eventos
podemos llamarle: “La metamorfosis de la mariposa”, pues son cuatro las etapas
de transformación que sufre esta especie.
Cada etapa persigue un objetivo
diferente, las orugas necesitan comer mucho para lograr alcanzar la segunda
etapa de crecimiento, el hombre necesita tener un corazón dispuesto para
recibir a Jesús y el entendimiento claro que seguirlo es la mejor decisión que haya
tomado antes.
Dependiendo
del tipo de mariposa, el ciclo de vida puede durar entre un mes y un
año. Dependiendo del nivel de entrega, compromiso y Fe que tenga el hombre
puede conocer a Cristo en un instante, o tomarse toda la vida y no conseguirlo.
La primera etapa de la mariposa: el huevo
Una
mariposa comienza su vida como un muy pequeño huevo de forma redonda. Dentro de
este huevecillo crece una pequeña oruga, algunos pueden ser redondos, ovalados
o acanalados. Los huevos habitualmente
son colocados en las hojas de las plantas.
La primera etapa del nuevo nacimiento del
hombre: la conversión
Más
que un cambio de comportamiento, se trata de un cambio en la misma naturaleza
del ser humano; Un cambio de corazón y un bautismo de fuego que viene como
resultado del esfuerzo justo por seguir al Salvador. Dichos esfuerzos incluyen:
la fe en Jesucristo, el arrepentimiento del pecado, el bautizo, recibir el don
del Espíritu Santo y perseverar hasta el fin en la fe.
La segunda etapa de la mariposa: la larva
Las larvas de mariposa son en
realidad lo que llamamos orugas,
las que no suelen permanecer durante mucho tiempo en ese estado y
principalmente lo que hacen mientras dura, es comer.
Cuando
el huevo eclosiona, la oruga inicia su trabajo y se come la hoja en la que ha
nacido. La hoja que se selecciona para poner un huevo debe ser de un tipo de
hoja que la oruga pueda comer, a cada tipo oruga le gusta sólo ciertos tipos de
hojas.
La segunda etapa del nuevo nacimiento del
hombre: la plantación
El
hombre recibe el conocimiento que le identifica como creyente en Jesús.
Conociendo el fundamento de la fe, la salvación como propósito del nacimiento,
vida y muerte de Jesús; Y los beneficios adquiridos al reconocer a Jesús
como salvador. Se desarrolla la relación con Dios a través de la oración,
la alabanza, la adoración y la lectura diaria de la Biblia. Es plantado bajo la
cobertura de un determinado pastorado. Cada creyente forma parte de una
congregación, crece y se desarrolla bajo los lineamientos de su pastor(a).
La tercera etapa de la mariposa: la crisálida
Tan pronto una oruga ha
alcanzado cierta longitud y peso, se envuelve a sí misma en una especie de
crisálida. Desde el exterior de la misma pareciera como si la oruga estuviera descansando,
pero en el interior está cambiando rápidamente. Dentro de la crisálida las
partes antiguas del cuerpo de la oruga están experimentando una notable
transformación, denominada metamorfosis, los tejidos, órganos y miembros de la
oruga han sido modificados en el tiempo que dura la crisálida para completar su
ciclo.
La tercera etapa del nuevo nacimiento del
hombre: el discipulado
Se empieza con la formación
cristiana donde el creyente profundiza en el estudio de la Biblia, lo aplica a
su vida diaria y encuentra herramientas para hacer más efectivo su ministerio.
Desarrolla habilidades de liderazgo, aprende cómo ser transmisores
efectivos del evangelio y cómo ser portadores del ADN de la iglesia. En
esta etapa el creyente ha sufrido una total trasformación física y espiritual.
La cuarta etapa de la mariposa: la mariposa
adulta
Cuando la oruga ha hecho toda
su transformación dentro de la crisálida, se puede ver cómo emerge una mariposa
adulta. Al principio las alas van a ser suaves y dobladas contra su cuerpo,
debido a que dentro de la crisálida debía adaptarse a las condiciones de su
nuevo cuerpo.
Tan pronto como la mariposa ha
descansado después de salir de la crisálida, bombeará sangre en las alas con el
fin de ponerlas en funcionamiento, poder volar, buscar una pareja y
reproducirse.
La cuarta etapa del nuevo nacimiento del
hombre: la multiplicación
En
este nivel se aprende a ministrar, formar y orientar a las demás
personas conforme a lo aprendido. La multiplicación es el crecimiento y
extensión del evangelio a toda criatura. Hacer
discípulos es la forma de nuestro señor en su infinita sabiduría, para escoger
seguidores fieles para llevar el mensaje de salvación a todos los pueblos del mundo.
Ningún creyente es
preparado y lleno del espíritu de Dios para guardar sus dones o solo usarlos
para sí mismo, todo lo que es dado de Dios es para ser extendido a los demás y
de esa forma multiplicar la obra en toda lengua y nación. Él incluyó esto como
un mandato en sus últimas palabras antes de su ascensión al cielo: "Toda
potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced
discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del
Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo" (Mateo 28:18-20).
Mientras más me sumerjo
en los caminos de Jesús, no logro descifrar todas las cosas, recuerdos sueltos
en mi memoria siempre ocupan un lugar, porque de forma misteriosa y
espectacular el señor se mueve. Me queda claro que no debo tratar de
comprenderlo, más bien, creer, confiar y esperar. 
Mientras más me sumerjo
en los caminos de Jesús, no logro descifrar todas las cosas, recuerdos sueltos
en mi memoria siempre ocupan un lugar, porque de forma misteriosa y
espectacular el señor se mueve. Me queda claro que no debo tratar de
comprenderlo, más bien, creer, confiar y esperar. 
